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jueves, 14 de abril de 2011

Teoria y Filosofia de la Vida Eterna 1

http://www.angelfire.com/in4/alchemy2084/inmortalidad3.html

Las objeciones que se oponen a la Vida Eterna se basan, invariablemente, en limitaciones del pensamiento. Una objeción clásica que plantean con frecuencia quienes nunca se han detenido a pensar en la Inmortalidad es: "¡Qué horror!" ¡Con lo miserable que es esta vida que llevo! Seria un infierno seguir ligado durante toda la Eternidad a este cuerpo deteriorado que no funciona muy bien que digamos."
Lo que en realidad están diciendo estas personas es: "Me siento desdichado con la Vida y no veo forma de solucionar mis problemas. Creo que el escapar de la Vida por medio de la muerte me facilitaría la resolución de mis problemas." Cualquier filosofía auténticamente inmortalista da una respuesta clara y constructiva a este tipo de malentendidos. Ni la Inmortalidad genética ni las píldoras elaboradas en el laboratorio darán nunca resultado. Sencillamente, quedarían en manos de los ricos y los poderosos sin que la humanidad en su conjunto llegara a disfrutar de ellas. En la actualidad son numerosos los humanistas ateos que escriben acerca de la Inmortalidad Física. Si bien estos autores ofrecen percepciones de indudable valor, su enfoque es decididamente equivocado, pues la Vida Eterna ha sido siempre y siempre será una Vedad espiritual profunda. Una cualidad fundamental que deben desarrollar todos los aspirantes a inmortales es un Amor ardiente y apasionado por la Vida - por la Vida en su Totalidad. La Filosofía Inmortalista exalta la Vida como el fenómeno más sagrado y divino del Universo.
Entre los temores que opone a la Inmortalidad el pensamiento mortalista y limitado podr&iacut;a citar asimismo: el temor a envejecer y marchitarse, el disgusto hacia el popio cuerpo o sexo y el temor a quedar atrapado en la Inmortalidad eternamente contra la Voluntad de uno mismo. A estas alturas, espero que el lector atento sea capaz de responder sin problemas a estas objeciones. La Inmortalidad supone un Dominio absoluto del Cuerpo. Cada uno de nosotros posee una hermosa Imagen Divina que se manifiesta plenamente cuando alcanzamos la Inmortalidad Física. Los Inmortales se SIENTEN TOTALMENTE A GUSTO en su Forma Física, tanto hombres como mujeres. La Inmortalidad es la uacute;nica forma de Existencia Divina en la que gozamos de absoluta libertad de Elección. Si, tras haber sido Inmortal durante miles de años, decides retornar a la muerte y al sufrimiento, nadie te lo va a impedir. En todo momento, los Inmortales tienen libertad para crear cualquier realidad que desee su Volutad Verdadera liberada. Pueden decidir adoptar la apariencia de los 18 años, como sucede a menudo en el caso de Maria, o de los 6.000 años, con cabellos blancos como la nieve, como suele manifestarse Enoc. Los Inmortales no sufren el influjo de los conceptos culturales relativos a laedad y a la vejez: pueden rejuvenecer rápidamente a Voluntad. Se muestren con 18 o con 6.000 años, los Inmortales son siempre bellos, llenos de energía y rebosantes de salud. La Carne Incorruptible es una uniín perfecta de Estructura y Energía Divinas: pura, relajada, activamente Despierta, radiante y desbordante de un SENTIMIENTO continuo de Dicha Absoluta.
Los Inmortales no piden excusas por Amar la Vida sin restricciones. Las filosofías que rechazan la Inmortalidad Física tienen un carácter dualista y establecen una pugna entre apego y desapego, entre permanencia e impermanencia. Tomemos un ejemplo evidente: un error muy común consiste en pensar que no debemos apegarnos la cuerpo físico por cuanto es impermanente. Esta idea drea una separación, un dualismo: debemos unir el Yo superior a la Divinidad, separándolo de todo aquello que no tenga carácter divino. El cuerpo se considera, equivocadamente, como algo no Divino, una ilusión, algo perverso.
La Filosofí y la Experiencia Inmortalista aúna al Creador y la Creación en un Todo Unico, Divino, El cuerpo se percibe como el Templo de la Verdad más sagrado, destinado a no destruirse jamás. La materia es sagrada, viva, Divina. La Divinidad está absolutamente unida a la Vida. Una de las Revelaciones más profundas a las que tiene acceso la Conciencia Inmortal se produce cuando se establece el contacto con la Voluntad Verdadara presente en cada partícula iota de la Creación. El nivel de las partículas iota constituye el tejido microcósmico final, situado en los mismos límites del vacío: son las partículas subatómicas más diminutas que existen. El Mensa je que nos transmite continuamente la Voluntad Verdadera desde todas y cada una de las partículas iota dudara por un solo instante, o perdiera la Voluntad de alcanzar la Inmortalidad Física, el Universo desaparecería para siempre... Tan unidas están la Divinida y la Vida. Los inmortales no tienen reparos en proclamar esta misma Dedicación desde el mismo tejido de su Carne: Que la Palabra se haga Carne.
Copyright © 1999 Robert Coon

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